Ayer por la tarde, mientras esperaba el 48, mi señora esposa me señaló un cartel que había en la marquesina. Era uno de los carteles de propaganda para la prematriculación en la Escuela Pública Vasca. Como me pareció muy curioso le saqué una foto con el móvil y hoy le he estado dando unas cuantas vueltas – sociolólogo degenerado que es uno.
En el cartel – en este, ya sé que hay otros- hay algo que sorprende de entrada y que es la mayor relevancia de la identidad sobre la comunidad – no hablo en términos técnicos, pues entonces tendría que hablar de «asociación». De hecho aparece úna única persona y no un grupo como sería de esperar hablando de una institución como la escuela – y no me vale que haya varios carteles porque en ese caso los tendría que ver todos simultáneamente.
Pero se trata de una identidad culposa. Culposa , en primer lugar respecto de la integración, pues se nos muestra a un inmigrante o descendiente de inmigrantes dando el mensaje «aunque tengas la piel oscura» en el que lo problemático es precisamente el «aunque». Y culposa en segundo lugar por la ambiguedad sexual de la ilustración que parece niño y niña a la vez,de lo cual a su vez deriva otro mensaje del tipo «aunque» o «a pesar».
Aún así todo lo anterior parece estallar en una identidad civil superior como la que se manifiesta en la apología- por si acaso dibujada- del fútbol, llamando a superar las diferencias por medio de la práctica deportiva- ¿estará detrás el fenómeno Iñaki Williams?
Y, por fin , si la vista se nos va hacia las periferias lo que encontramos no es sino una coleción barata de tópicos infanto-adolescentes, algunos hasta pasados de moda…( ¡Miren, miren bien el cartel por favor!
No sé a quién se le habrá ocurrido perpetrar el cartelilo de marras, pero con tantos «aunque» , sin ningún valor «a favor» y con tal resolución final tan tópica como viejuna, más bien parece una invitación a hacer la prematrícula en la privada – dicho sea con todos los respetos que esta última opción me merece…
Acertado y agudo como siempre.
¡Qué ganas de poder compartir uno de esos maravillosos cafés en el Iruña!
Hay veces que tengo ganas de gritar: «Oye pero ¿no veis que el Rey está desnudo?», pero rápidamente me vuelvo a lo políticamente correcto y al buenismo («palabro» que odio) que nos invade .
En fin, que me encanta leer tu blog, antes de empezar la jornada.
Agradezco y mucho tus palabras que me animan a continuar. Un cordial saludo.
Arrazoia…. tanta integración forzada, está diluyendo la capacidad educativa de nuestra escuela pública.Ni un solo moro en la concertada. no duran ni dos cursos…
Qué poco debes conocer la concertada…en muchos de esos centros tanta integración o más que en la pública de su localidad…y menos gasto
las
Estimado amigo: creo que tu comentario ha quedado cortado. Sería muy interesante que lo completaras.Gracias de antemano.
Bravo.