MATILDE HUICI ( una mujer republicana)
14 de abril.Un nuevo aniversario de la proclamación de la II República Española, el último intento de despegar de la piel de toro los liquenes verdosos del Antiguo Régimen, muy antiguo y muy régimen.
La conciencia ( histórica, o lo que sea) al respecto parece mostrarse muy vaporosa sobre todo para las nuevas generaciones de milenials, salvo en los casos en los que haya habido alguna anécdota familiar, revestida de ejecuciones, de desapariciones, o de exilio.
En mi familia ha habido de todo, predominando el toque nacionalista ( vasco, por supuesto ) aunque siempre con un toque liberal, como el de mi abuelo Ataulfo Urmeneta, padre de Miguel Javier Urmeneta, un vasquista poliédrico.
Pero también hubo republicanos, y particularnente una republicana , Matilde Huici, lejana pariente recuperada al cabo de los años por la indagación histórica, por ejemplo de la mano de Mª Nieves San Martín Montilla , o Ángel García Sanz.
Matilde Huici Navaz- ya firmaba con su segundo apellido- nació en Pamplona en 1890. Estudió Magisterio en Bilbao y Leyes en la Universidad Complutense de Madrid.
Gracias a una beca de la Junta de Ampliación de Estudios, pudo desplazarse a Vermont (USA) donde se especializó en Pedagogía.
Militante socialista, fue miembro de una generación de mujeres cultas, comprometidas y feministas, siendo compañera de Clara Campoamor, María de Maeztu y Victoria Kent, con las que fundó la Asociación de Mujeres Españolas Universitarias.
Viajó a la URSS y volvió entusiasmada y radicalizada. Desempeñó varios cargos políticos durante el periodo republicano y cuando estalló el levantamiento militar trabajó en la Sociedad de Naciones (hoy ONU) y posteriomente se exiló en Chile, mientras sus más próximos eran fusilados.
En Chile, creó una red educativa dirigida a la primera infancia de la que todavía quedan algunos centros y , por fin, murió en Santiago de Chile en 1965.
Vaya pues un recuerdo para ella en este día y con él un homenaje a todas aquellas mujeres cuya huella intentó ser borrada…
LOS DESAYUNOS DE LOS MARTES (La Copa del Rey)
La Junta Extraterritorial del Desayuno de los Martes se ha reunido por fin y sorprendentemente un martes y a la hora del desayuno ( bueno, a partir de las 9 horas y 16 minutos) en su sede eqüe-principal del Café Iruña.
A petición anterógrada de nuestro sociólogo Mikel, la tenida ha sido convocada en la modalidad de situation room ,»dados los eventos consuetudinarios que acontecen en las rúas con banderolas y pancartas» (sic).
Ansí que, conticuere omnes, una vez aprobado el Acta de la Reunión Anterior por unanimidad, ha sido el infrascrito quien, churro en ristre, ha tomado la palabra para mostrarse preocupado por la deriva p´ublica en que ha devenido la próxima celebración del partido final de la Copa entre el Athletic de Bilbao y el R.C.D.Mallorca pues ,»como en ocasiones anteriores, los claros clarines están sonando demasiado pronto y se está vendiendo la piel del oso antes de matarlo, lo cual que puede trascender en caso de fracaso en una depresión colectiva que no va a ser en modo alguno el mejor contexto para la cita electoral que se celebrará prácticamente a continuación» (sic).
Intentique ora tenebant , hasta que ha intervenido Koldo nuestro «psiquiatra-siempre- de-guardia» indicando al respecto que no hay nada mejor que una buena depresión para llegar «al fondo de las cosas y de los cosos» (sic) y de esta manera tomar tierra después de tanta volatil algarabía,y que , además, y en su caso, darle al kalimotxo puntual suele salir mejor que el diazepam programado.
Por su parte, Patxi, ha apuntado que las depresiones colectivas son siempre un buen nutrimento para los guiones distópicos y aunque él está más bien a favor de las «distopías positivas» (sic) , piensa volver a ver Dune para inspirarse ad hoc, sobre todo tras el original análisis que ha leído en el blog de Javier González de Durana.
En el tendido del gineceo ha habido división de opiniones. Laura se ha mostrado sorprendida «ante tanta negatividad» (sic), aunque ella y su «marido-ideal-de-la-muerte» siempre han sido más bien del Real Madrid y este partido ni le va ni le viene.
Marta ha encarado el asunto citando profusamente a Durkheim y a los momentos de efervescencia colectiva que tanto hacen por asentar la identidad, por lo que,alzando su taza de té, ha soltado un discreto «¡Eup!» añadiendo un «aquí paz y después gloria».
Por otro lado, Itzi, no ha dicho ni mú, dedicándose tan solo a hundir una y otra vez su segundo croissant en su café con leche doble, y Amanda, nuestra jurista, ha preferido emitir un voto particular indicando que el tema no le interesa en absoluto y que por lo tanto se abstiene de esto y de todo lo anterior, señalando no obstante «el caracter monárquico del asunto en tanto que lo que se disputa es una Copa del Rey» ( sic, too)
Y, por fin, entre restos de bollería, tazas y vasos vacíos , a las 11 horas y 3 minutos , se ha dado por concluida la Junta.
De todo lo cual doy fe a.d. XIII Kal. Martius.Anno DCCXXII ab Bilbao urbe condita. Yo , el Secretario Perpetuo de la JEDM.
[firma ilegible]
APOSTILLAS AL NOMBRE DE LA COPA
¿La excesiva presión social sobre los jugadores del Athletic no ayuda nada, deportivamente hablando?
Desde que a raíz del acta de la última reunión de la Junta Extraterritorial del Desayuno de los Martes, mi fiel seguidor (¿ o seguidora?) intitulado Sarrasketa mentara las palabras del ex Caparrós acerca de que la excesiva presión social sobre los jugadores del Athletic no ayuda nada, deportivamente hablando, he recibido un buen montón de comentarios, la mayor parte irreproducibles,bien por su extensión, bien por su acritud, bien por su inadecuacion ,así que he optado por borrarlos todos y dejar tan solo el primero sive original.
Any way, sí puedo ofrecer una clasificacion sintética y ejemplar de todos ellos , y que es la siguiente:
- INSULTOS ( del tipo «mal nacido», «hi de puta», » ¡ cállate, cabronazo!» etc.)
- ALGARABÍAS ( al modo «Athleeeeetic» y » A vi , a la va…», » ra, ra, ra»)
- DESAZONES ( «No sé cómo te puedes dedicar a escribir sobre esas tonterías», «Y de Gaza y de Palestina ¿qué?…)
- INTERPRETACIONES( «Idola fori», «religiones civiles» ,» mucho más que un club» …)
- VARIOS ( que no aparecen en esta clasificación)
Pero acaso, los listados mentados pueden resumirse en un comentario singular , de un tal Cartujano que decía: «Pero esta Copa, ¿ no lleva por nombre Copa del Rey? ¿Tanto monárquico hay por allí?»
Y, en fin, no puedo sino agradecer tanta atención, aunque, como diría Josep Pla, tampoco sé si lo anterior podría interesarle a alguien…
TRAS LA ESTELA DE LA GABARRA (por José-Félix Merladet)
Una vez más, y en este caso tomando como referencia la gran concentración que se produjo el pasado jueves día 11 de abril con ocasión de la victoria copera del Athletic de Bilbao, presento las reflexiones de José-Félix Merladet, miembro del Taller de Escritura Autobiográfica que coordino:
«Por el río Nervión/bajaba una gabarra/con once requetés/de boina colorada/Rumba la rumba la rumba/la rumba del cañón» (Versión original del s. XIX)
De las características con las que Émile Durkheim define una religión en su clásico Las formas elementales de la vida religiosa, el culto al Athletic parece reunirlas todas: tiene dogmas de carácter cuasi religioso (como lo de ser el único equipo del mundo de primer nivel que no contrata jugadores de fuera de su cantera /región), rituales cautivadores, antiguos, permanentes, incluso catárticos, (himno, atuendos, cánticos, imágenes, alirones, etc.) y un grupo de fieles militantes o ecclesía. También hay un gran milagro santificador: que un club de Primera, sin foráneos o extranjeros, no haya bajado jamás, en más de un siglo, a Segunda División.
Incluso tiene aspiraciones proselitistas universales, pues dispone de peñas fervientes distribuidas por todo el mundo. Además, como otras grandes religiones que suponen unos lazos y estructuras superadoras de las divisiones sociales o raciales, también genera un factor centrípeto de cohesión social que tiene importantes connotaciones políticas, pues casi todos los habitantes de la actual Bizkaia se sienten solidarios en esa adoración al Club, sean del origen geográfico, del apellido, sexo y de la adscripción partidista que sean. Es muy curioso que incluso forofos que se consideran republicanos e independentistas se sientan tan orgullosos de haber ganado una Copa… del Rey de España.
Asimismo , tras la pandemia y entre guerras que nos atenazan y amenazan desde Ucrania, Gaza, Irán e Israel, parece acuciante el deseo de evadirse y entretenerse, pues se ha generalizado la vieja concepción de que este gran Teatro del Mundo «son dos días» ante la que parece avecinarse, una variante del viejo panem et circenses.
Para muchos mágica la gabarra, para unos pocos gran tabarra, hay que reconocer que esta nueva religión laica sirve para solidarizar, unir, amigar, «re-ligar» en un ambiente festivo a gentes que de otra forma se despedazarían entre sí y tal vez lo hagan – si por desgracia, decaen pronto los recuerdos y el “buenrrollismo” que se vivió en puentes y riberas – tras las próximas y muy reñidas elecciones. Pero esa es otra religión…
LA CIUDAD VIVA ( ¿y ruidosa)
Las autoridades con mando en plaza deberían mostrarse más severas mostrando más eficacia por lo menos a la hora de hacer cumplir lo que ya está legislado…
Recientemente se ha celebrado en el Centro Municipal de Distrito del barrio de Abando de Bilbao una mesa redonda que podía haberse celebrado en cualquier centro de distrito municipal de cualquier gran ciudad.
Pues el título de la misma era Una ciudad viva ¿tiene por qué ser ruidosa? y es que en el proceso de expansión hostelera que mayormente acompaña a la turistización, la contaminación acústica ha comenzado a ser ya un problema de salud casi tan grave como en su momento lo fue el consumo de tabaco: ese fue por cierto el núcleo de una de las intervenciones a cargo de profesionales psico-sanitarios de los estudios de sueño.
En efecto, cada vez son más abundantes los barrios y calles en los que la ciudadanía debe compartir su descanso con la actividad hostelera hasta altas horas de la madrugada haciéndose el descanso imposible y favoreciendo el uso desmedido de somníferos y tranquilizantes.
Por supuesto, y como también indicaron otros intervinientes, hay una colusión de intereses en juego a la hora de analizar este problema: así por un lado y en primer lugar están los de los ciudadanos que no pueden dormir en condiciones pero también los de aquellos otros que no desean dormir sino disfrutar de la noche ,y por fin pero no en último lugar los de los hosteleros que a quienes no parece importarles mucho ni lo uno ni lo otro si en la cuenta de la vieja aparecen unos suculentos beneficios.
Y en medio de este circuito problemático están las leyes y los decretos ad hoc, pero sobre todo los Ayuntamientos, a quienes, en última instancia, les toca inspeccionar y en su caso sancionar hasta el cierre los correspondientes establecimientos, si bien en algunos casos esta última función puede conllevar una disminución de los estipendios que llegan a las arcas muncipales: uno de los asistentes al acto dijo literalmente que «el Ayuntamiento se muestra débil frente a la fortaleza de la Hostelería» a la que otro contertulio tildó de «mafiosa».
Sin suscribir las anteriores afirmaciones, las quejas del vecindario no parecen generar una gran efecto – en algún momento se llegó a describir un caso sangrante- , ni siquiera las re-transmitidas por el Ararteko, hasta el punto de desconfiar de la dirección de misma Policía Municipal que en muchas ocasiones «no está ni se le espera».
Se habló también de desplazar los lugares de ocio a polígonos urbanos específicos, pero de inmediato surgieron las dudas en relación al transporte ( mayormente nocturno) y a las condiciones de los transportables...
Así que la contaminación acústica no parece tener un remedio fácil ni inmediato, pero mientras tanto acaso las autoridades con mando en plaza deberían mostrarse más severas mostrando más eficacia por lo menos a la hora de hacer cumplir lo que ya está legislado…
25-A (o «Grândola,Vila Morena…»)
Todavía, al escuchar los primeros compases de «Grândola, Vila Morena» , la canción de José Zeca Alfonso que desde Rádio Renascença marcó el comienzo del levantamiento del 25 de abril de 1974, algo vibra dentro de aquellas gentes que eran anti-fascistas pensando, como decía Manuel Vázquez Montalbán, que eran revolucionarias…
Ahora que se cumplen 50 años de la Revolución de los claveles, he vuelto a ver Capitanes de Abril, la película de María de Medeiros, a cuya proyección asistí por casualidad en 2001 en el cine Sao Jorge de Lisboa, ciudad a la que había acudido a un congreso de filosofía.
En aquella ocasión me sorprendió el excaso público y el menor interés por aquel episodio de la historia portuguesa – habían pasado 26 años- pues por entonces los comentarios que se podían escuchar por la calle se referían mayormente al icono máximo de la post-modernidad lisboeta que eran los grandes Armazens do Chiado.
No sé hasta qué punto aquellas jornadas formarán ahora parte de la conciencia colectiva lusa, pero no puedo eludir la significación que tuvo en estos lares.
Pues contemplar que las fuerzas armadas de un Estado vecino terminaban con la dictadura de Marcelo Caetano , mientras Francisco Franco y su «Régimen» continuaban vivos, se interpretó por aquí como un precedente de lo que podría ocurrir y que no ocurrió, pues el ejército español- a pesar de la UMD- era de otra calaña.
Lo que luego vino en uno y otro caso ya se apuntaba en una de las últimas conversaciones del film de Medeiros, en la que el capitán Maia ( espléndido Stefano Accorsi) charla con su colega Manuel (Fréderic Pierrot) recordando al excéptico comandante Gervasio ( impresionante Joaquim de Almeida):
-Hemos ganado esta guerra
-No lo sé, quizá los enemigos serán ahora menos visibles, o se diluirán democráticamente en la legitimidad de sus funciones…
Pero todavía, al escuchar los primeros compases de «Grândola, Vila Morena» , la canción de José Zeca Alfonso que desde Rádio Renascença marcó el comienzo del levantamiento, algo vibra dentro de aquellas gentes que eran anti-fascistas pensando, como decía Manuel Vázquez Montalbán, que eran revolucionarias..,
UN AÑO DE HAIKU ( de Ricardo Egiguren)
En el mundo de la creación literaria, hoy cercado por la novela y absolutizado por su vertiente negra descafeinada, no es frecuente encontrar a alguien particularmente interesado por la poesía. Y desde luego todavía es menos frecuente dentro de ese ámbito que alguien se encandile en fondo y forma con esa variante poética mínima que constituye el haiku.
Por todo ello no deja de ser sorprendente el libro de Ricardo Egiguren (Leioa 1957) , titulado Un año de haiku (Eguzkilore, 2024) que he recibido recientemente con una cariñosa dedicatoria.
Egiguren , a quien conocí en un taller de escritura dirigido por la escritora Mónica Crespo, es autor de varias obras narrativas como Cuentos para Goizalde –Goizaldentzako kontakizunak (2020) o Paso Norte (2023), así como otras de carácter más ensayístico como Mariposas que puedes observar en tus paseos por los Pirineos(2012).
En los libros mencionados ya se puede constatar un particular aprecio por la observación de la naturaleza que en este caso se ha formalizado acogiéndose a la práctica del haiku, breve poema de origen japonés que en sus tres versos y diecisiete sílabas pretende dar cuenta , a veces sorpresivamente, de una imagen apenas vislumbrada, de un aroma huidizo o de un sonido lejano.
En este sentido,los haikus de Egiguren se presentan en un registro clásico, agrupados, siguiendo la tradición, según el criterio del «kigo» , es decir, el devenir estacional, y acompañados de un breve texto narrativo que contextualiza su momento creativo, un tanto al modo del célebre Sendas de Oku de Matsúo Bashô:
Entre temporal y temporal, se han abierto momentos de calma y quietud en esta estación tan fría.Las tardes con sol de invierno son placenteras
Día sin viento
la tarde soleada
luna creciente
Un libro, en fin, para disfrutar tanto en su lectura como levantando la mirada para dejarse llevar por las evocaciones que suscita entre verso y verso, cada uno de sus haikus…
UNA ESQUELA ( y unos celtas cortos)
MRS in memoriam
Fumaba sin parar celtas cortos que encendía uno tras otro con una caja de cerillas enceradas.
Hojeando el periódico, he encontrado su esquela. Ha muerto joven, con tan solo sesenta y ocho años…
…Era 1972 y estudiábamos el primer curso de Filosofía y Letras en la Universidad de Deusto bajo la égida de algunos profesores singulares como el excéntrico historiador del arte Luis Lázaro Uriarte o el excelente latinista Santiago Segura.
La había visto por primera vez en la cafetería de la Facultad , al fondo ,en una mesa esquinada mirando hacia el ventanal, nostálgica de algo indefinido. Al día siguiente me la presentó una compañera que se sentaba a mi lado en el aula y que era amiga suya desde la infancia.
Fumaba sin parar celtas cortos que encendía uno tras otro con una caja de cerillas enceradas. No sabía muy bien qué hacía allí, pero sobrevivía – decía- a base de un entusiasmo mínimo, aunque estaba un tanto preocupada porque se la caía el cabello inopinadamente.
Más adelante coincidimos más veces entre algún que otro café y casi siempre compartiendo un pincho de tortilla de patatas , famoso a pesar de estar hecho con huevina. Y también en el cesped verde y ciudado del campus, ella mirando hacia el cielo con desgana y yo hacia ella con mucho detenimiento.
Tenía un punto de femme fatale y una coma de existencialismo primitivo que desembocaban en dos puntos muy atractivos para mí, jovencísimo recién llegado de la negra provincia de Flaubert y lector novato de Mundo Obrero.
Pero mis poemas , tan primitivos como vanguardistas, una extraña mezcla de Gerardo Diego y Samuel Beckett, no captaban su atención, abducida y acaso con razón por el alpine amarillo con el que su novio solía ir a buscarle.
Un buen día, mala tarde para mí, desapareció sin dejar rastro y luego desaparecí yo y ya solo quedó el recuerdo de una sucesión de encuentros fugaces, cada vez más desdibujados a fuer de brillantes. Y un olor, el del humo de aquellos celtas cortos.
Y después nada. Durante cincuenta y dos años no he sabido nada más de ella, hasta que, como he dicho, hoy he visto su esquela, una esquela que se suma a otras tantas, según una ley quizás justa pero no necesaria…
MADRID (la tarde que llegue a)
Mientras caminabamos por la calle del Príncipe hacia la Plaza de Santa Ana, he recordado mis primeros madriles y mis primeros entusiasmos…
En esta mi jubilación profesoral en la que procuro cumplir con aquello del «otium cum dignitate», no puedo eludir las invitaciones de algunos amigos y amigas que me han acompañado a lo largo de los años.
Así, el lunes por la tarde, pasada la resaca pascual ,griposillo, y con la juerga colectiva pendiente a cuenta del triunfo copero del Athletic , me he acercado a Madrid a otro de los talleres de escritura que en este caso coordina un colega que no quiere ser identificado. La excusa, una vez más, charlar un rato sobre El hilo de Ariadna (Nuevas aproximaciones a la razón narrativa), mi último parto.
En el taller, entre los asistentes predominaba la edad media y, salvo dos excepciones, la mayoría, como en otras ocasiones, eran mujeres- en algún momento habrá que profundizar en esto .
Llegado mi turno, más allá del libro ,he estado hablando del valor simbólico de la escritura y del espacio literario en el que se inscribe una vez publicada, y lo he hecho como quien prefiere tratar del software y no tanto del hardware. Ante mis primeras palabras, he notado algún que otro carraspeo, luego varias miradas dirigidas hacia el suelo, aburridas, y otras, hacia el techo, contrariadas. He citado a Bourdieu y a Barthes, como siempre,pero también a Stendhal o a Proust y, en fin, hasta al Kennedy de La conjura de los necios. Y al cabo me he resumido en una parrafada, afirmándome en la necesidad de conocer los motivos de esta libido scribiendi y avisando de la crudeza de las editoriales, de la arbitrariedad de la crítica y, por supuesto, del público ignoto e impenitente.
Finalizada mi intervención, una de las asistentes, de cabello negro y ensortijado, me ha dicho con ojos acuosos que he sido muy cruel y que se le han quitado todas las ganas de seguir escribiendo. He asentido en silencio : suele ser esta una de mis misiones en estos bolos para evitar males posteriores y mayores –he mentado de pasada el suicidio de algunos escritores (y escritoras) famosos, pero no su condición sexual que tanto interesa a veces.
Otra de las asistentes ha señalado algo enfadada que la organización de este taller de escritura debería tener en cuenta los deseos y expectativas de los asistentes al planificar las intervenciones de los invitados, y tratar, por ejemplo, de la construcción de los personajes. Uno de los dos participantes varones, un señor serio y corpulento, se ha levantado y, sin decir una palabra, ha tomado las de Villadiego.
Quienes al cabo se han quedado, me miraban con expectación, como si esperaran que yo debiera decir algo para compensar las intervenciones anteriores. Como no he dicho nada , mi viejo colega y coordinador del taller me ha dado las gracias y ha iniciado un tímido aplauso que se ha disuelto entre los primeros movimientos de sillas y mesas.
Cuando la gente ha comenzado a levantarse, he recogido mis cosas lentamente para permitir que todo el mundo fuera saliendo. Una joven en quien no había reparado se me ha acercado invitándome a ira tomar algo a la Cervecería Alemana : «Sí, por supuesto».
Y mientras caminabamos por la calle del Príncipe hacia la Plaza de Santa Ana, he recordado mis primeros madriles y mis primeros entusiasmos. Las largas tertulias del Comercial y la pequeña buhardilla de la calle Libertad. Aquella felicidad de haber huido de la negra provincia y estar por fin en la capital, eso sí, con un manuscrito en la maleta…
MATONISMO (¿inmobiliario?)
María del Carmen López Marco in memoriam
«…antes de que se pueda generalizar esta nueva variante de matonismo, el matonismo inmobiliario…»
Esta mañana he comprobado desde una ventana que en el agujero del que tantas veces he hablado no había ninguna actividad. Según se dice en el barrio, la paralización puede deberse a que la empresa (MURIAS-URBAS) encargada del vaciado de la parcela y la posterior construcción de un gigantesco edificio ha entrado en concurso de acreedores.
Pero cuando he salido a la calle para iniciar mi paseo matutino, he percibido cierto alboroto, y he visto que uno de los miembros destacados de la plataforma Abando Habitable y Saludable que está en contra de este macroproyecto , estaba siendo acosado por un individuo que ha sido identificado como el jefe de obra de la constructora en cuestión.
Tras unos minutos de gran tensión ,ha aparecido una patrulla de la Policía Municipal de Bilbao y ha levantado un atestado de los hechos.Posteriormente se ha presentado la correspondiente denuncia.
Todo lo anterior no hace sino abrir la posibilidad de una vía penal por acoso más allá de la ya abierta en el ámbito civil ante lo que una gran parte del vecindario considera un «pelotazo» urbanístico organizado entre la Diócesis de Bilbao y la aseguradora MUTUALIA ,con el beneplácito del edilato mayoritario local.
Pero ,entre tanto, no estaría de más que la dirección de la mentada empresa expedientara al aguerrido acosador cuya conducta, al parecer, es reiterativa. Y también sería conveniente que las autoridades religiosas correspondientes , propietarias originarias de los terrenos, condenaran estos hechos.
Todo antes de que se pueda generalizar esta nueva variante de matonismo, el matonismo inmobiliario…
ESCRITURA (placer y goce de la)
Me ha escrito un antiguo alumno de un Taller de Escritura en el que participaba hace algunos años. Me dice que tras publicar un par de libros – dos novelas breves muy bien resueltas- se siente bloqueado y que no encuentra la manera de enhebrar de nuevo la escritura.
El bloqueo del animal de pluma es un tema viejo y sobre el que se han dicho muchas cosas, pero a mí siempre me ha parecido de lo más atinado un libro de Victoria Nelson, titulado precisamente Sobre el bloqueo del escritor, que ya recensioné hace más de una década. Así que, para no repetirme, ahí va aquella nota para él y para quienes puedan estar en una situación similar:
» La disciplina creativa surge del placer, no de la tiranía sobre uno mismo ni de la autocrítica «. La frase es de Victoria Nelson, cuyo libro Sobre el bloqueo del escritor es un excelente repaso a varias cuestiones acerca de la práctica de la escritura y , por extensión, del arte.
En esas palabras se acumula aparentemente mucha sabiduría, resultan un pequeño compendio exacto y acogedor. Pero, más allá del asentimiento espontáneo que implican, ¿ se puede comprender adecuadamente qué es lo que postulan ? Vayamos por partes.
Hay en esta frase varias expresiones claramente definidas, cuando no tópicas. Por ejemplo disciplina creativa. Sobre esta expresión lo menos que se puede decir es que su contenido es ya una verdad asumida y contrastada – salvo esas excepciones que siempre confirman la regla – : la creación precisa de una disciplina. Es decir, el proceso de generación y desarrollo de nuevas formas plásticas o discursivas solicita generalmente de quien se dedica a ello un aprendizaje continuado y cierto sometimiento de su conducta a unas reglas más o menos severas.
Otro tanto ocurre con la expresión tiranía sobre uno mismo. Casi todo el mundo ha experimentado la vivencia de tiranizarse en una situación excepcional de tipo profesional – un trabajo que hay necesariamente que terminar – o personal – por ejemplo, obligarse a salir con los amigos sin muchas ganas después de un desastre sentimental.
En cuanto a la autocrítica es algo admitido que cuando es excesiva y repetitiva – y sobre todo esto último: ese arrepentirse continuamente de lo que se ha hecho – denota una inseguridad profunda, muy compatible, por cierto, con proyectos megalómanos de relación interpersonal o de trabajo. Pero también se sabe que una autocrítica matizada, lograda tras un discreto alejamiento de lo que se ha hecho o se ha pretendido hacer, cuando se realiza amorosa y comprensivamente, es la mejor ayuda que cualquiera puede tener. Incluso más efectiva que cualquier crítica proveniente de un amigo o de un enemigo.
Sin embargo, la expresión placer es la que presenta mayores dificultades en su definición y tanto más cuanto que se convierte en el eje significativo de toda la frase.
En efecto, Victoria Nelson nos dice que la disciplina a la hora de la creación no surge de la mera obligación, ni mucho menos de la obligación auto-impuesta como consecuencia de una autocrítica patológica, sino que surge del placer, pero, ¿ qué es el placer?
En principio el placer es un deleite proporcionado por algo que gusta mucho. Así, por lo tanto, el sometimiento que implica la creación vendría impulsado por el propio deleite que ella genera. Pero, ¿ cómo sería posible un placer que requiere un sometimiento sin aceptar una interpretación masoquista? La cuestión se complica, además, toda vez que el placer suele tener una connotación pasiva y, por el contrario, la creación resulta ser algo activo.
¿ Estamos, pues, hablando de otra cosa? ¿ Cómo podríamos expresar una sensación que gusta mucho pasivamente y que es, sin embargo, producto de cierto sometimiento activo ?
Quizá la respuesta la haya dado, entre otros, Roland Barthes en su El placer del texto. En dicha obra Barthes ha distinguido entre placer y goce, atribuyendo a esta segunda expresión un significado más aproximado de lo que queríamos dar cuenta. El goce no sería algo pasivo, sería un placer activo – muy equivalente, por otro lado, a la activa inactividad tan necesaria ante la creación… pero ésta es ya otra cuestión. El goce sería así el placer ocasionado por un sometimiento activo que, además, generaría creación. Esta sería la diferencia, por ejemplo, entre leer y escribir. Pero esta sería también, como lo expone el propio Barthes, la diferencia entre un texto de placer y un texto de goce .
Así que la frase de Victoria Nelson debería reformularse de la siguiente manera » La disciplina creativa surge del goce, no de la tiranía sobre uno mismo ni de la autocrítica «. De esta forma se podría superar la aparente contradicción entre el activo sometimiento a una disciplina y un placer pasivo. El placer-goce de la creación.«
(c) by Vicente Huici Urmeneta
Ya veo que te doy muchi juego , camarada huici.Por mí, aurrera bolie.
Gracias y muchas.