Hace unos tres años, preparando una ponencia para un Congreso, se me ocurrió incluir la expresión «zoon elektronikón» para caracterizar el nuevo tipo de individuación que se estaba – y se está- generando en nuestra sociedad , inmersa en el mundo de las TIC y de las redes sociales.
Pretendía así actualizar la antigua expresión aristotélica de la definición de ser humano como » zoon politikón» ( o «animal social») que se prolongaba en » ejón lógon» ( o » que tiene palabra» en sentido cualitativo). Por supuesto, individuación – como bien indicó Michel Foucault- no quiere decir subjetivación, es decir que el «zoon elektronikón» es todavía más efecto que causa y suficientemente inconsciente de su condición como para ser sujeto ( o sujeta) de algo.
Pero aún así, esta nueva forma de individuación quedaba bastante clara definiéndose a este nuevo tipo de ser humano como «un individuo en red, siempre conectado y a la vez desubicado espacio-temporalmente, cuyo ámbito de socialidad se vincula a su propia activación en la red, y que no precisa para su desenvolvimiento sino de una limitada memoria de trabajo«.
La definición se las traía, y a lo largo de estos años ha sido una y otra vez matizada hasta alcanzar, quizá su máxima expresión en un artículo publicado junto con mi colega Andrés Davila *.
Y se me ocurre que la caracterización de este » zoon elektronikón» quizá pueda ser un punto de partida más para reflexionar sobre la historia de nuestro presente, un presente en el que ya parece que no podemos vivir – y sobrevivir socialmente- sin smartfones, tablets u ordenadores, o sin FACEBOOK, TWITTER O WHATSAPP…
*Huici Urmeneta, V. y A. Davila Legerén (2016): “Del Zoon Politikón al Zoon Elektronikón. Una reflexión sobre las condiciones de la socialidad a partir de Aristóteles”, Política y Sociedad, 53 (3), pp. 757-772.
http://revistas.ucm.es/index.php/POSO/article/view/50776